- “Es como desafiar a la muerte pero
seguiré siendo minero”, dice Antonio Díaz
- Ante el peligro de no salir
vivo, solo pensaba en sus hijas
Bonanza, Nicaragua (AP)
"Volver a ese lugar sería como desafiar a
la muerte, pero seguiré siendo minero". Antonio Díaz es uno de los 20
mineros nicaragüenses rescatados tras pasar 34 horas bajo tierra, sepultados
por un derrumbe en la mina donde buscaban oro.
Dos
obreros más salieron poco tiempo después del accidente, ocurrido el jueves en
la región noreste de Nicaragua, y los equipos de rescate mantienen el operativo
para intentar hallar al menos a cuatro que continúan desaparecidos.
Después
de pasar más de un día sepultado en vida, Diaz, de 32 años y minero desde hace apenas
un año y medio, contó el sábado a The Associated Press su experiencia, el apoyo
que se daban entre sí para mantener el ánimo alto, el frío que pasaron bajo
tierra y cómo los fue invadiendo la sensación de hambre en la especie de cueva
en la que se refugiaron tras el derrumbe.

















